Un ritmo de sueño constante es bueno para el corazón. Por el contrario, una rutina de sueño irregular puede ser perjudicial para el corazón. Un sueño irregular es perjudicial para la salud. Si una noche te duermes temprano y a la noche siguiente te acuestas a las 3 de la madrugada, para volver a dormirte la noche siguiente, estás corriendo un mayor riesgo de sufrir un infarto y enfermedades cardiacas.
Según un estudio de investigación realizado por la Universidad de Harvard el año pasado, las personas que tenían rutinas de sueño irregulares corrían un mayor riesgo de padecer enfermedades relacionadas con el corazón. El estudio, realizado en más de 2.000 adultos durante 6 años, se centró en sus horas de sueño regulares. Según los investigadores, el tiempo de sueño regular es quedarse dormido dentro de la misma ventana de 30 minutos de media cada día. Por ejemplo, si una noche te duermes a las 23:00 y a las 23:27 la noche siguiente, sigues estando dentro de los límites de tu rutina de sueño regular. Pero incluso el más mínimo retraso de su horario de sueño habitual puede ser una amenaza para su salud. Los participantes que tuvieron un desfase de 90 minutos entre su rutina de sueño habitual en el transcurso de una semana, duplicaron su riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares en los cinco años siguientes.
Las duraciones de sueño incoherentes son perjudiciales para el corazón. Por cada cambio de una hora en la duración del sueño nocturno, hay un 27% más de probabilidades de desarrollar síndrome metabólico, que es un grupo de afecciones que aumentan el riesgo de padecer enfermedades cardiacas.
Los trabajadores por turnos, los fumadores y las personas que sufren depresión tienden a tener una rutina de sueño irregular. Acostarse a horas inestables también aumenta el riesgo de padecer los siguientes problemas de salud:
- Obesidad
- Presión arterial alta o hipertensión
- Diabetes
- Accidente cerebrovascular
Mantener una rutina de sueño constante puede ser beneficioso para la salud, la mente y el corazón.
Cómo mejorar su horario de sueño
Asegúrese de acostarse a la misma hora todas las noches. Con esto en mente, he aquí algunas formas sencillas de seguir una rutina de sueño disciplinada.
Conozca su cronotipo: En pocas palabras, es tu reloj biológico el que define tu rutina diaria. Pero no es necesario que todas las personas tengan el mismo reloj biológico que funciona al mismo ritmo. Tú tienes tu propio cronotipo, que te ayuda a determinar el mejor momento para realizar tus actividades diarias, incluyendo cuándo comer, descansar, hacer ejercicio y cuándo acostarte.
Evita la cafeína y el alcohol: No es ninguna sorpresa que la cafeína tomada unas horas antes de dormir puede arruinar tu rutina de sueño. Es aconsejable evitar estos estimulantes durante la noche. Por otro lado, el alcohol ayuda a conciliar el sueño, pero en realidad no es útil y, en cambio, interfiere con el ritmo circadiano regular.
Vigila la temperatura: La mejor forma de conciliar el sueño por la noche es bajar la temperatura de la habitación. Al bajar la temperatura corporal antes de acostarse, puede alcanzar el sueño REM más rápidamente, lo que ayuda a su cuerpo a recuperarse más rápido durante la noche. La ropa cómoda también desempeña un papel crucial para conciliar el sueño rápidamente.
Relájate: Antes de acostarte, limita el uso del teléfono, que afecta al sueño. En su lugar, date una ducha caliente antes de acostarte. Un baño caliente ayuda a enfriar el cuerpo más rápidamente al mejorar la circulación sanguínea. Leer un libro, en lugar de ver una serie, siempre es mejor para conciliar el sueño.