La fibromialgia es una condición médica caracterizada por múltiples síntomas. El síntoma principal es un dolor intensificado generalizado en múltiples regiones del cuerpo. Se cree que la fibromialgia amplifica los receptores del dolor a través del mecanismo por el que su cerebro recibe estos mensajes. Curiosamente, las mujeres se ven afectadas con más frecuencia que los hombres. Las áreas comúnmente afectadas incluyen el cuello con dolores de cabeza por tensión, junto con la región de la mandíbula con trastornos de la ATM. Se desconoce el desencadenante de esta afección, pero se cree que existen vínculos entre el inicio y el postraumatismo o la cirugía, junto con experiencias de estrés psicológico. Si cree que ha experimentado alguno de los casos anteriores, es posible que padezca fibromialgia. Aunque no existe una cura conocida, se ha demostrado que los medicamentos y las intervenciones físicas reducen los síntomas.
La fibromialgia es una condición médica caracterizada por múltiples síntomas. Estos son individuales para cada persona, pero comúnmente involucran múltiples regiones de dolor e incomodidad. Afecta aproximadamente al 2-5% de la población, con una mayor incidencia en mujeres. Aunque ocurre en todos los grupos de edad, el inicio más común es durante la mediana edad.
Se desconocen las causas de la fibromialgia, pero se encuentra más comúnmente en personas con comorbilidades específicas:
- Artritis Reumatoide
- Enfermedad o trauma físico reciente
- Antecedentes familiares de fibromialgia.
- Estrés / Depresión
También se desconoce el desencadenante de la aparición de esta afección, sin embargo, se han teorizado ciertos factores ambientales:
- Cambios de clima
- Aumento del estrés mental
- Infecciones / alergias
Se cree que la fibromialgia amplifica los receptores del dolor a través del mecanismo por el que su cerebro recibe estos mensajes. Las áreas comúnmente afectadas incluyen el cuello por dolores de cabeza por tensión, junto con la mandíbula que experimenta trastornos de la ATM. También puede encontrar una mayor capacidad de respuesta a los estímulos sensoriales, como el calor o la luz.
El diagnóstico de fibromialgia implica, en primer lugar, un proceso para descartar otras afecciones asociadas que se presentan con un conjunto similar de síntomas. Esto se debe a que no se conocen procedimientos médicos para diagnosticar firmemente esta afección. Un ejemplo es la artritis reumatoide. Su médico puede enviarlo a una prueba de sedimentación de glóbulos rojos, que mide el grado de inflamación en su cuerpo. Una vez que se han descartado tales afecciones, el diagnóstico de fibromialgia se confirma mediante un examen físico que destaca múltiples puntos sensibles en su cuerpo, junto con su retroalimentación subjetiva.
¿Cómo puede la fisioterapia ayudar?
Aunque no existe una cura conocida, la fisioterapia puede ayudar a reducir sus síntomas para permitirle vivir mejor con la afección. Los siguientes son algunos ejemplos de los métodos que los fisioterapeutas pueden usar para lograrlo:
- Educación : mediante la enseñanza de técnicas de autocontrol, puede mejorar su rango de movimiento y fuerza en las articulaciones afectadas.
- Ejercicio : se ha demostrado que el ejercicio aeróbico ligero reduce el dolor, la fatiga y los trastornos del sueño a través de la liberación de endorfinas, el «subidón natural» del propio cuerpo.
- Técnicas de manejo / relajación del estrés : a través de modos como el masaje y la
acupuntura, puede permitir que su cuerpo se relaje y reduzca su tensión.